jueves, 2 de julio de 2009

Segundas partes

Creo que hay dos tipos de personas.

Uno es el de los que ven la vida con calma, sin sobresaltos. No sufren grandes excitaciones, pero tampoco sufren grandes decepciones. Es su carácter y son capaces de repetir y repetir como un conejito de Duracell, disfrutando una y otra vez.

Yo, sin duda, pertenezco al otro tipo. Los que tienen altibajos enormes, grandes disgustos y grandes alegrías. Tipo noria, unas veces estás en lo alto del mundo y acto seguido te hundes en la más profunda miseria.

Y los que son como yo, disfrutan mucho más de los primeros viajes que de las repeticiones.

Carlos no es excesivamente comunicativo, por lo que lo que voy a decir es totalmente subjetivo, pero adivino que lo que a Carlos le impresionaba por ser su primera vez, a mi me dejaba frío por ser la segunda. Frío y lo que es peor, inapetente.

No es malo dejar de sorprenderse a cada minuto y dejar de vivir en un estado de permanente excitación. Uno podría aprovecharlo para disfrutar de la serenidad en lugar de lamentarse por carecer de estímulos fotográficos, por ejemplo.

Pero no, uno se lamenta de carecer de estímulos fotográficos; y ya de paso, se lamenta de que un segundo viaje no sirva para nada más que para comparar entre el primero y el segundo, porque no da ninguna ventaja competitiva en un país como Cuba, donde todo es fácil; pero si eres turista lo eres sin remisión.

Fotográficamente hablando, yo he sido incapaz de repetir el tipo de fotos que hice la primera vez y excepto en un rato en que le cogí gusto al disparador, el resto lo pasé con la cámara metida en la mochila. Una pena. Un centenar de fotos es muy poco frente a las 2.500 del viaje anterior.

- ¿Por qué no habrá un término medio?
- Haber nacido del otro tipo de personas.

2 comentarios:

  1. Yo creo que disfrutaría una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez...

    ResponderEliminar
  2. Yo creo que el simple hecho de coger un medio de transporte (en mi caso tengo que pensar preferentemente en el avión) para un viaje turístico (no esos por curro, de ida y vuelta el mismo día) es una gozada. Pero con lo grande que es el mundo... prefiero no repetir. Japón, Nueva Zelanda, Argentina, Canadá, Holanda, Navarra, Galicia... buffff... cuanto mundo por conocer!!!!

    ResponderEliminar