martes, 30 de junio de 2009

lunes, 29 de junio de 2009

Y Don Miguel tenía razón

Y yo estaba confundido. Confundido entre el mojito y el daikirí.

Tras el chasco del primer mojito servido a Miguel en el Santo Ángel, mal recordé que había dos recetas del mojito, una con angostura y otra sin ella. Estuve pesado el resto del viaje insistiendo en ese punto.

Ahora llega la comprobación y la amarga realidad es que solo hay una receta de Mojito:



Ingredientes

Azúcar .................................... 1/2 cucharadita
Jugo de limón ........................ 1/4 onza
Yerbabuena (hojas)
Cubos de hielos
Ron blanco ............................. 1 1/2 onzas
Agua de soda

Preparación
En un vaso de jaibol diluir bien con un poquito de agua de soda. Añadir hojas de yerbabuena y machacar el tallo (sin dañar las hojas) para que suelte el jugo. Cubos de hielo. Agregar 1 1/2 onzas de ron blanco.

Llenar el vaso con agua de soda y revolver.

Adornar con hojas de yerbabuena.

Sin embargo, el Daikirí si tiene varias recetas, la receta natural de 1898:

Ingredientes:
Jugo de limón .............................. 1/4 onza
Azúcar .......................................... 1/2 cucharadita
Ron blanco ................................... 1 1/2 onza
Trozos de hielo

Preparación
Batir y servir colado en una copa de coctel o a la roca (sobre pedazos de hielo).

y la moderna, como la que nos sirvieron en 2005 en La Floridita:



Ingredientes:

Azúcar .................................. 1/2 cucharadita
Jugo de limón ...................... 1/4 onza
Gotas de marrasquino
Ron blanco ........................... 1 1/2 onzas
Bastante hielo frappé

Preparación
Batir bien en la batidora y servir en una copa de champán.

Y este es el origen de mi doble error: Confundir mojito por daikirí y marrasquino por angostura.

De modo que si queréis saber algo sobre mojitos (vosotros cubanos, también), preguntadle a D. Miguel.

Con mis disculpas.

Don Miguel y las "bucanero"

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domingo, 28 de junio de 2009

Michael Jackson

- ¡Oye!, que se ha muerto Michael Jackson!
- Ya, ¿pero eso qué tiene que ver con este blog y con nuestro viaje a Cuba?
- Nada, pero no iba a ser el único blog del mundo que no lo mencionara.
- ¡Ah, bueno!

Road movie

La última peliculilla que tengo, una Road Movie en miniatura, recorriendo la carretera que va, bordeando la costa, desde Guantánamo hasta el cruce con la carretera de montaña que se dirige a Baracoa, carretera singular que recibe el nombre de "La Farola" y voceada por el régimen como un logro de la Revolusión.

Esa carretera es bonita, no esta mal de firme y tiene el encanto de que los habitantes del lugar te ofrecen frutas: mangos (estamos en temporada, por eso hay tantas moscas), piñas, plátanos, unos albaricoques que parecen higos chumbos y la especialidad de la zona, los cucuruchos de dulce de coco.

Esos cucuruchos merecen párrafo aparte. Son deliciosos, una especie de confitura de coco, dulce y nutritiva. Comida allí, con hambre, es memorable. Traída a casa, se seca y pierde mucho encanto.

El caso es que para ser un producto tan perfecto, contenido y continente, es barato. Compras 3 por 1 CUC, o 10 por 3 CUC sin negociar.

El cono de hoja seca de palma, con su tapadera y su cierre con asa es un misterio de artesanía popular hasta que pasado Baracoa en dirección a Holguin y un poco antes de la conocida fábrica de cacao ves a la derecha, entre otras, la fábrica de cucuruchos.

Otro triunfo de la Revolusión.


Seguridad aérea

De entre las neuras político-policiales que la humanidad prodiga, una de ellas es la pretendida seguridad aérea mediante el paso de arcos y escáneres.

Lo de los líquidos en Europa es para nota, pero lo de pasar un control tras desembarcar es también demencial.

¡Coño! ¿No has visto que no he hecho explotar el avión?¿Que rayos quieres descubrir en mi equipaje de mano?

¿Caramelos?¿Bolígrafos?¿Camisetas?¿Aceite de oliva?

¡Capullo! ¿A ti que más te da? Si esto no es más que elevar la balanza de pagos del país, aunque sea microeconomía.

¡Tonto!

Claro que los listos están en Madrid. En otro control a la llegada, me hacen abrir la mochilita de las cámaras. El que miraba la pantalla se hace hueco entre carretes no expuestos y llega hasta un objetivo, identificado como el origen de la sospecha.

Su compañero, se acerca por encima del hombro y lleno de suficiencia dice: ¡Es el gran angular!

¡Toma ya! ¡El listo!

La foto que nunca tendré

... y que recordaré toda mi vida.
La salida del edificio, del Aeropuerto de La Habana, un calor que se me hace insoportable, pegajoso, todo el suelo mojado aún por la recién caída tormenta vespertina. El sol ya se ha puesto, unas nubes distintas, un luz de color cálido, entre rosa y anaranjado, una luz especial. Ahí en frente, un contraluz bestial. Un coche típico, años 50-60, con su conductor apoyado en el maletero mientras espera, espera a no sé quién, a alguien. Y mi cámara colgada en mi espalda, dentro de la mochila. Click... foto sin soporte.

Casa de la Trova de Santiago de Cuba

Ya han arrancado los textos, ahora estos momentos musicales sirven para poner telón de fondo a las palabras.


sábado, 27 de junio de 2009

La burocracia idílica, ó inútil

Ante todo, gracias Arturo por haber ido cubriendo mi retraso en aportar algún contenido. Te debo un mojito.
Haceros saber que he estado pensando qué exponer, qué contar de la multitud de momentos y sensaciones que he vivido durante este viaje. Son tantos que se me amontonan.
He decidido empezar hablando de "su burocracia".
Nada más despegar de Madrid, te entregan dos formularios imprescindibles para poder entrar al país. Oh, oh!!! quieren saber muchas cosas, y nada ¿dónde nos vamos a alojar? Pequeña reunión en la fila 10, y siguiendo instrucciones del jefe del comando, optamos por anotar nuestra tercera dirección en cuba: El hotel Porto Santo en Baracoa. Otras cuestiones tales como profesión, las veces que has visitado anteriormente el país, si traemos pornografía, o algún tipo de arma, o algún producto de origen animal o vegetal (ejem, ejem). Lógicamente, nada de nada, pues sólo somos unos turistas más o menos armados con cámaras, pseudo "fotógrafos". En 10 horas de vuelo conseguimos rellenarlos, y antes de tomar tierra. Nada más entrar por la puerta del aeropuerto, nos obsequian con otro formulario destinado a declarar que estamos muy sanitos, y que no andamos paseando por el mundo con la gripe "A" a cuestas, y van tres. Con nuestros tres formularios cumplimentados, iniciamos los trámites de acceso al país:
- Control de pasaportes y visados: Mire a la cámara... sellos en el visado... etiqueta pegada al pasaporte de día de entrada... todo ok. Se abre el cierre eléctrico de de puesta, y pasamos al siguiente control, con los tres formularios a cuestas.
- Arco detector de metales y escáner para equipaje de mano: Fuera el cinturón de mis holgados pantalones (casi monto un espectáculo por uyyyy, quedarme en paños menores frente a la "eficaz" encargada del puesto. Menos mal que fui rápido sujetándome a la altura del cinto), fuera reloj, monedas, etc, etc... y todo junto al escáner. Superado el segundo escollo, y lon tres formularios siguen conmigo.
- Mesas de control de epidemias: Dos ¿enfermeras? en cada mesa donde, oh maravilla, me recogen mi declaración de estar sano sanote. Me preguntan no se qué, muy bajito muy bajito, pero recién bajado del avión ando un poco taponado de oído.Eso de las presiones, y sus variaciones. Lo mejor, contestar que estoy perfectamente, y paso con sólo dos formularios. ¿Qué me han estado preguntando? bah!!!! no importa.

Tras las mesas, esperan las cintas de recogida de equipajes. Para quien tenga que ir a La Habana... no es necesario leer, y si decides leer, no fiarse de lo que indiquen las pantallas. Es el bautismo que te introduce en juego cubano conocido como"no te fíes". Lo que tienes que hacer es ir practicando el estrabismo, y controlar simultáneamente las dos cinta que existen. Bueno, bueno, bueno... finalmente tenemos nuestras maletas.

- Control policial previo a la salida al país: Aún poseo dos de los tres formularios cumplimentados... concretamente los que nos dieron en el avión. Nos miran pasar si más. Ya estamos en el país, y con dos panfletos en nuestro poder. Ambos correctamente cumplimentados, y firmados.

Y al final de todo, con la cara de buenas personas que paseamos, ¿no es mejor así?¿por qué tenía esa pobre gente que recopilar papeles, archivarlos, hacer estadísticas con los datos en ellos contenidos, ocupar algún espacio de algún mega archivo durante algunos meses, o incluso sospechar de alguno de nosotros y destinar a alguien para que nos vigilase? No, no, no. Pienso que es mucho mejor no estresarlos con tanta información. Mejor que cada turista que entre en Cuba se lo lleve de recuerdo.

No veas lo que visten mi panel de corcho, ese que tengo aquí, junto al ordenador, medio vacío.

jueves, 25 de junio de 2009

Otro ratito de música en vivo

Para que no decaiga la fiesta, desde el restaurante El Santo Ángel en la Plaza Vieja de La Habana, y para todos ustedes...


miércoles, 24 de junio de 2009

Interludio musical

A la espera de nuevas contribuciones, dejo aquí este bonito interludio musical protagonizado por el fugaz ángel del Hotel Los Frailes de La Habana Vieja.


martes, 23 de junio de 2009

Introducción

Hay un papel escrito con tinta roja y tipos de linotipia que dice:



y es un buen punto de partida para un blog donde, si Carlos quiere porque él tiene las notas, podemos contar nuestras impresiones y vivencias de ese viaje a Cuba que acabamos de realizar.

Estamos recién llegados, recuperando algunas maletas y el ritmo de este lado del Atlántico, pero sería una pena no alargar el viaje para nosotros y reflejarlo tímidamente para los que quedaron aquí dando vida a este blog primero, quizá un libro de fotos después, qué sé yo.

Algo habrá que hacer.

Eso espero, viendo la vida pasar.